miércoles. 24.04.2024

Un mito muy extendido es que elevar la presión neumáticos puede ayudar a ahorrar combustible. Aunque esto técnicamente sí es cierto, eleva también el riesgo de tener un accidente, lo que hace que no sea tan rentable.

El fabricante nos propone un par de presiones: la primera es la recomendada, la que deberíamos de llevar en el día a día.

La segunda es la adecuada para cuando viajamos cargados y por autovía. Esta tabla de presión de neumáticos nos puede ser muy útil en ciertas ocasiones en las que podemos necesitar meter un poco de aire en las ruedas… pero nunca deben de superar los 200 gramos de aire por encima de la presión que recomienda el fabricante.

Cuando elevamos la presión de neumáticos, en el interior habrá más aire, por lo que toda la estructura estará más dura. Se producirá una menor deformación contra el asfalto, menor contacto y, por ende, menos resistencia.

Es verdad que puede ayudar a bajar un poco de consumo, pero esto tan solo debería de ser contemplado en casos extremos, como si vamos a hacer viajes largos en los que  iremos cargados.

Otro de los problemas de no respetar esta tabla de presión de neumáticos y elevarla en exceso está relacionada con la distancia de frenado. Si se aumenta de manera considerable, se eleva el riesgo de accidente en el caso de que se produzca un frenado inesperado.

Reflexionemos un momento sobre esto: con tan solo aumentar la presión 0,2 bares por encima de lo normal, se reducirá el confort, la suspensión estará más dura, aumentará la rumorosidad de rodadura y se incrementarán los riesgos.

No es recomendado inflar de más el neumático porque también será más fácil que se deforme; se curvará la rodadura central hasta que deje de ser seguro viajar con él.

¿Cómo se debe de medir correctamente la presión?

Un error muy habitual es añadir más aire de lo normal pensando que la presión no es la adecuada: y esto ocurre porque no se ha medido correctamente.

Importante: La medición de la presión de neumáticos siempre se ha de hacer en frío. Esto quiere decir que no se debe de haber recorrido 5 km en 2 horas.

Puede darse el caso de que necesitemos medir si o si la presión, pero el coche no haya parado el tiempo que ya hemos comentado. En este caso, no nos quedará otra que sumar 300 gramos a la presión que hayamos sacado. Por ejemplo, en el caso de que la medición con neumáticos calientes nos haya salido de 2.1, tendríamos que sumas 2.1 + 0.3 + 0.2 = 2.6 bares, mientras que en frío serían 2.5 bares.

No te la juegues: por lo poco que consigues ahorrar en combustible no sale a cuentas viajar con la presión del neumático más elevada de lo normal. Sigue siempre lo que dicta la tabla de presión de neumáticos y no habrá problema.

Daños que puede sufrir tu automóvil si inflas los neumáticos de más.