sábado. 20.04.2024

Érase una vez en un lugar, sin saber por qué se empezaron a recitar versos… El Ágora de la poesía que se celebra en el anfiteatro de San Marcos, el último viernes de cada mes, acaba de cumplir 4 años. Poesías, un lugar, gente, una linterna e ilusión a raudales, así comenzó todo. Y el Ágora comenzó a reunir a poetas y amantes de la palabra hiciera frío, calor, lloviera o no.

“Salir a la calle a escuchar poesía es un gesto preciosista y absurdo semejante a robar un solo zapato caro, pero en León sucede de vez en vez" Luis ArtigueLuis Artigue: “Salir a la calle a escuchar poesía es un gesto preciosista y absurdo semejante a robar un solo zapato caro, pero en León sucede de vez en vez…“...la poesía forma parte de los anhelos, las dudas y las tormentas con las que concelebrábamos la existencia bajo las tintas del ocaso o la brillantez expresiva de la noche, y si no lo creen asistan alguna vez al Ágora de la Poesía“; “La idea inicial, yo soy testigo, fue llevada a cabo por tres corazones aventureros sin ánimo de lucro o de vanidad saturada portados por personas con nombres que han de pronunciarse ahora con lírica gratitud y así, como regalándoles una merecida corona de laurel: Sandra Sánchez, Ramiro Pinto y Eduardo Príncipe Contrahecho”…

41 panora¡Y tantas cosas han pasado! Transcurre cada mes, encontrándonos para escuchar poesías, para leerlas o recitar. Es un encuentro sin organización, basta que alguien esté pendiente y sin más pretensión, sin más ni menos. No es un espectáculo. Es un hecho poético. Es poesía.

Hay cosas que es bueno comentar, para no dejar que se oxide el paso del tiempo o se aleje por palabras corrosivas, que las hay. Y mirarnos, no el ombligo, sino por dentro.

Se ha logrado un espacio colectivo, para todas las personas y a disposición de cada una, con la única limitación del tiempo, en lo que siempre han sido amables los electricistas del Ayuntamiento.

Es un espacio que hay que defender, por su sencillez: depende de encontrarnos, de la voluntad de hacerlo y tal es lo poético. Es lo que es, sin solapar a nada ni a nadie.

Se han leído poemas en diversos idiomas, incluido en lleunes, y bien. Lo hermoso es que se reciten en el mismo acto versos impúdicos, otros sociales, otros de erotismo junto a poemas a la Virgen, al corazón humano o de amor en la distancia y al desamor. Se han leído de poetas consagrados en el mundo de la literatura, de quienes se dijo que no vendrían y sí han estado, porque se dijo que se creyeron la élite, pero al compartir este rincón hemos aprendido de otras formas de poesía y convivido mundos poéticos y personales muy diferentes.

Es un espacio que hay que cuidar, querer, amar, poetizar y mimar, porque no es de nadie, sino de todas las personas, abierto, donde no hay una selección previa sino que basta con apuntarse. Se ha querido acaparar una función provisional, como la presentación, en algún momento. Los más lo han hecho para colaborar, sin que sea un agravio no hacerlo. Se han lanzado diatribas con historias que no son, simplemente falsedades.

"Quedamos para hacer un corro, una feria para intercambiar versos y pasar del yo al nosotros, de lo íntimo de la palabra a lo colectivo para dar sentido a la comunicación literaria. Del silencio al otro, para formar una corriente entre las dos orillas. Como un río siempre es el mismo, pero nunca es igual", explican los organizadores. Y al comienzo de la primavera presentaron el segundo libro del Ágora de la Poesía con muchos autores que nunca hubieran publicado ningún poema. La editorial LápizCero y su responsable Xavier de Tusalle han apostado por esta nueva forma de comunicar poesia.

Y nosotros con estos retazos que recopila Ramiro Pinto en su web, solo queremos desear un feliz cumpleaños cargado de poesía a este singular e incomparable encuentro.

¡Feliz cumpleaños Ágora!