sábado. 20.04.2024

El concepto de creatividad es difícil de definir, siendo muchas las disciplinas que han aportado diferentes concepciones a este término. Se han utilizado muchas palabras como ingenio, inventiva, pensamiento original, imaginación constructiva, pensamiento divergente o pensamiento creativo.

La creatividad ha existido desde siempre, es una habilidad del ser humano y, por lo tanto, vinculada a su propia naturaleza. Antiguamente se entendía la creatividad como un don divino que pertenecía solo a algunos elegidos. Por ejemplo, para Sócrates, el don se poseía por inspiración, era la divinidad la que movía al creador. A partir de 1920 comenzó a abrirse el camino a concebir al ser humano como posible creador. Fue en 1950 cuando el psicólogo norteamericano J.P. Guilford realizó una charla titulada “Creatividad”, dando inicio a un gran número de investigaciones científicas sobre la misma.

De entre la multitud de definiciones que existen vamos a quedarnos con la idea global que la creatividad es la capacidad de crear y que como tal nos permitirá la generación de nuevas ideas, conceptos o de nuevas asociaciones entre ideas y conceptos ya conocidos y que están orientados a producir soluciones originales. Una persona es creativa cuando a partir de un conjunto de estímulos ve lo que nadie había visto antes y hace algo nuevo. La creatividad no solo se manifiesta en forma artística, literaria, tecnológica, científica, etc., sino que también puede apreciarse en la vida diaria (forma de vestir, decoración del hogar, trabajo, etc.). Así pues, la creatividad es un potencial que todas las personas tenemos.

Algunas de las características más comunes que suelen observarse en personas o personalidades creativas son: Confianza en sí mismo, valor, flexibilidad, elevada capacidad para la asociación, capacidad intuitiva, fineza en la percepción, imaginación, originalidad, capacidad crítica, inquietudes intelectuales, características afectivas para sentirse queridos y apreciados, soltura, libertad, entusiasmo, tenacidad y profundidad.

La creatividad es la forma más libre que tenemos de expresarnos. Esta capacidad ayuda a los niños a enfrentar sus sentimientos, a estimular su inteligencia y a reconocerse como ser único con características peculiares. De ahí la importancia de estimular la creatividad, tarea que debemos hacer desde el entorno familiar y social del niño.

Los especialistas recomiendan fomentar la creatividad de los niños por los beneficios que reportan: Construye la autoestima y aumenta la conciencia de uno mismo (los niños se sientan seguros para expresar sus sentimientos y emociones). Favorece la socialización (los niños son más expresivos y al no esconder sus sentimientos son más capaces para conocer los de los demás y ser más receptivos). Desarrolla la comunicación. Fomenta el crecimiento mental para que prueben nuevas ideas y nuevas maneras de pensamiento y de solucionar problemas.

Educar en la creatividad, es educar para el cambio y formar personas ricas en originalidad, visión de futuro, flexibilidad, iniciativa, confianza, dispuestas a asumir riesgos, sin miedo a equivocarse y preparadas para afrontar los problemas que les vayan surgiendo en la vida.

Como se comenta más arriba, fomentar la creatividad es una tarea que debe implicar tanto al entorno familiar como social. ¿Y qué podemos hacer como padres/madres y educadores para desarrollar la creatividad en los niños?:

- Cuando el niño pregunte algo, cuestionémosle sobre qué piensa él.

- Fomentar la autonomía y dejar margen a la equivocación, para que los niños aprendan en qué se han equivocado y puedan construir nuevos aprendizajes.

- Inventar cuentos y que el niño siga la historia. Cambiar el final de un cuento tradicional. Hacer una pequeña representación de un cuento. Improvisar disfraces.

- Enseñar tolerancia ante la diferencia, respetar sus puntos de vista.

- Estimular los cinco sentidos del niño.

- Promover la libertad de expresión.

- Dedicar tiempo para jugar y no dirigir sus juegos. El juego es el gran vehículo para que la imaginación y las emociones fluyan.

- Enseñarle a trabajar en grupo.

- Fomentar los intereses y curiosidades del niño.

“Todo niño es un artista, el problema es seguir siendo un artista cuando creces”.

Pablo Picasso

Juan Carlos Alcántara Amigo

Psicólogo

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LA CREATIVIDAD EN LOS NIÑOS