viernes. 26.04.2024

El año que viene también será políticamente complicado en Estados Unidos

El índice US Dollar (DXY) que se elabora con las diez divisas de los países miembros del G-10,se ha estado debilitando desde el principio de 2017, cuando alcanzó su nivel más alto en 14 años.

El DXY cae cerca de un 10% desde que empezara el año, en contraste con las expectativas de que viviría una fuerte subida. De forma similar, el índice Federal Reserve US WeightedBroadDollar (USWBROA), que incluye divisas emergentes, baja un 8% desde finales de diciembre, desde su máximo nivel en 15 años.

A decir de los expertos en Forex, los principales factores que contribuyeron a la debilidad del billete verde en 2017 fueron una aceleración del crecimiento global mientras EE.UU. se mantenía clavado en el 2% — el PIB de EE.UU. era un rezagado habitual en el G-3; el cambio de las políticas monetarias en muchos bancos centrales desde la relajación a la neutralidad, o apuntando al inicio de un nuevo ciclo de mayor tensionamiento monetario.

Por último, también contribuyó al sentimiento de debilidad del dólar en el forex, el final de los riesgos políticos en la Eurozona tras las elecciones presidenciales francesas y la pérdida en la confianza de que Trump tuviera la habilidad de pasar su agenda de reformas fiscales, gastos en infraestructuras y desregulación a la Administración estadounidense.

Tras las últimas correcciones, el dólar sigue sobre valorado un 10% frente a muchas divisas tales como el yen japonés o la libra esterlina en base a las medidas de valoración de la OCDE.

Y si utilizamos metodologías basadas en la inflación (IPC) y la ajustamos con los balances por cuenta corriente, el dólar está sobre valorado en un 30% frente al yen o la corona sueca.

Obviamente, en el Forex, determinar el valor de una divisa es muy difícil. Sin embargo, la mayoría de los estudios muestran que la valoración no sería un impedimento para que el dólar sufriera una depreciación de un 10% desde sus niveles actuales frente a muchas de las principales divisas o de mercados emergentes.

Los expertos en el Forex esperan que los aspectos que pesaron en la cotización del dólar en 2017 se mantengan por un tiempo. Las grandes economías mundiales van a seguir creciendo y los riesgos de una recesión están fuera de las previsiones, excepto por efectos no previsibles.

Y, más importante aún, la divergencia en política monetaria entre EE.UU. y la Eurozona alcanzó un punto de inflexión a primeros de este año. La Fed está a unas pocas subidas de alcanzar un tipo neutral en los fedfunds dado el entorno de baja inflación del país y la mayoría de las grandes economías del mundo.

Por el contrario, el BCE ha empezado a reducir sus compras de bonos públicos en abril. Se espera ahora que empiece a subir tipos en algún momento de 2018, con un ciclo que continuará mucho tiempo después de que la Fed haya terminado de subir sus tipos. Además, el proceso político europeo llega a su fin tras las elecciones francesas y aún más, con las alemanas de este otoño. Y, desafortunadamente, la administración Trump ha de afrontar un año difícil en 2018 con elecciones al Congreso en noviembre, por lo que hay una clara tendencia para invertir en el Forex.

La debilidad en el dólar estadounidense se mantendrá hasta bien entrado 2018.