miércoles. 24.04.2024

La primera vez que vi "Ocho Apellidos Vascos" y las siguientes también, pensé que Dani Rovira interpretaba el papel de "despistao y alelao," muy bien. Después de oírle sus mensajes ofensivos hacia los taurinos, pensé que no era una persona educada. Esto de ser educado ahora no se le da mucha importancia, pero yo recuerdo a mi padre cuando me decía siendo yo un chiquillo que esto o aquello no se hacía porque era una falta de educación y era suficiente para calibrar lo que estabas haciendo.

Ahora al leer sus manifestaciones en las que se quejaba de que el pasado día de Nochebuena su perro sufrió taquicardias, hiperventilación y nauseas por los típicos petardos de esas fechas, pienso que quizás en "Ocho Apellidos Vascos" no estaba interpretando.

El actor malagueño dice que “algo deja de ser divertido en el momento que pueda causar un trauma o herir a un ser vivo”. Me imagino que tras esta reflexión Dani Rovira haya dejado de conducir automóviles, ya que el daño causado a mosquitos, mariposillas, moscas, avispas, abejas, algún gorrión despistado, etc... al morir atropellados esos seres vivos por la acción de conducir sea algo que le perturbe. De la misma manera intuyo que para él no es divertido comer carne ni pescado ya que esos seres vivos han sufrido un “trauma” al ser sacrificados para el consumo humano. Para colmo, el actor hace la publicidad de los fideos con pollo de una conocida marca catalana. También intuyo que siempre vaya calzado con deportivas de tela o con zapatillas de andar por casa, porque la mayoría de zapatos están fabricados con piel de vacuno con el consiguiente “trauma” sufrido por esas vacas que han sido sacrificadas para hacer con su pellejo unos zapatos. Doy por hecho también que el pienso que utiliza para alimentar a su perro esté carente de cualquier subproducto animal como el que contienen la mayoría de pienso de perros. Pensará en el “trauma” que han sufrido esos animales para haber llegado a alimentar con su sacrificio a perros y seguro que le dará un pienso de lechugas a su mascota.

Dani Rovira comenta también, que la petición de “dejar de tirar petardos, la hacen los amantes de los animales”. Es decir, si a usted que está leyendo este artículo, le gusta tirar petardos en fiestas, celebraciones, o cuando quiera, o le gusta que los tiren los demás, no ama a los animales según Dani Rovira.

¿Este hombre sabe el número de gente que ese día, solamente en Madrid por poner el ejemplo de la ciudad de la que se ha quejado, durmieron en la calle o no pudieron cenar dignamente? Se queja de que a su perro le molestaron unos petardos...Personalmente cada día estoy más hasta el gorro de estos "petardos" como Dani Rovira que se esfuerzan en conseguir un mundo mejor para los animales anteponiendo estos a su especie que es la humana.

Van de animalistas y no tienen ni idea de tratar a un animal. Se piensan que por vestirlo como a una persona, por vivir en un piso como una persona y por defenderlos como a una persona, los animales viven mejor. Si pudieran hablar…

Recientemente acudí en Astorga al Circo Coliseo con mi hija. Nos lo pasamos genial. Qué bueno es ir al Circo. Y qué bueno que haya ayuntamientos como el de Astorga que permitan celebrar actuaciones con animales. Y qué triste tener que escribir esto, tener que destacar que dejan celebrar un circo con actuaciones en las que intervienen animales.

No tenemos políticos profesionales. Los que hay sólo les interesa su puesto y su sueldo. Y si para ello tienen que pactar con el diablo, no dudarán. Están entrando `por el aro en varios ayuntamientos, con las exigencias de grupos ecologistas, Izquierda Unida en Zamora por ejemplo y asociaciones animalistas que están consiguiendo prohibir circos, cabalgatas, desfiles, etc, en los que participen animales.

Pero que gente tan triste, aburrida, poco ociosa y dictadora. Si a ellos no les gusta eso, los demás tenemos que aguantarnos. Tenemos que ver el mundo con sus ojos, y pensar con sus mismos planteamientos.

¿El mundo será mejor si no hay circos con animales, cabalgatas de reyes sin caballos o camellos, desfiles tradicionales en las fiestas de los pueblos sin caballos, si prohíben los toros, la caza, la pesca y si prohíben las tradiciones?

Si prohíben todo esto ¿se van a acabar las guerras, el hambre, las desigualdades, la violencia de género, la despoblación, el paro, los desahucios...? ¿No? Bueno pues si una cosa no va traer la otra, resolvamos primero los problemas humanos y después los de los animales.

Por cierto la recogida de firmas del Circo Coliseo para que este tipo de circos sigan existiendo, durante los tres días que estuvieron en Astorga, un éxito.

¿Quién va a querer ir a un circo sin fieras ni domadores? Los artistas que trabajan con animales, si son animalistas. Son su vida, su día a día, su fuente de ingresos y manutención. Como no los van a tratar bien.

Antonio Ponce “El Titi” Foto: T. Marcos (Pancho) Libro: León Arena

LA VUELTA DE JOSÉ TOMÁS

José Tomás volvió a llenar la plaza de toros más grande del mundo y a generar la expectación a la que acostumbra y a deleitarnos con su muleta. Siguió fiel a su concepto y repertorio. Mantuvo su sabor y tono, pero esta vez todavía con un toreo más reposado, si cabe, una dimensión más profunda a su toreo. El compromiso del torero con su segunda patria es más que sabido. En esta ocasión, el festejo era benéfico para colaborar con las víctimas del último cataclismo sufrido en México. Y ahí estaba José Tomás, el número uno. A este no le hace falta torear todos los días para seguir siendo El Rey. Está "sobrao". Para lo que le echen. Los 40000 espectadores que petaban la plaza disfrutaron de lo lindo con el de Galapagar. Una oreja cortó al toro que le tocó en suerte. Se comenta en los mentideros taurinos, que esta temporada que va a comenzar, el maestro hará el paseíllo en unas diez plazas españolas. Ya habría estado viendo corridas en el campo según estas mismas fuentes. Si es así, crucemos los dedos para que León sea una de esas plazas. ¡Qué bien nos vendría a los aficionados leoneses! Y a la ciudad, por supuesto.

HA MUERTO “EL TITI”

Comienza este 2018 con una pérdida irreparable en el mundo del toro. El día 1 nos dejaba Antonio Ponce “El Titi”, con 98 años. Este sevillano, que llegó a hacer el paseíllo en La Maestranza de novillero con Curro Vázquez, fue uno de los grandes veedores que con su sabiduría de la tauromaquia sirvió a muchos empresarios taurinos en las labores de buscar corridas en el campo. Entre ellos a Gustavo Postigo, empresario de la plaza de León. Estuvo de veedor de Jesús Macua, empresario navarro, hasta los ¡¡93 años!! Que en gloria esté este magnífico profesional taurino y mejor persona.

|Enrique Gómez Arienza

MÁS QUE TOROS