El primero de los pasos de ese compromiso consiste en la contratación de un estudio de viabilidad del futuro parque, para lo cual la ministra anunció una dotación de 200.000 euros.
El proyecto de parque agroalimentario fue un anuncio del anterior presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, realizado a bombo y platillo en 3017, pero el actual ejecutivo autonómico se desmarcó de forma fehaciente de dicho compromiso, siendo los alcaldes de Ponferrada, Olegario Ramón, y de Camponaraya, Eduardo Morán, los que retomaron la iniciativa, ofreciendo para su ubicación terrenos colindantes de ambos municipios e invitando al Gobierno central, a través del Ministerio de Industria y específicamente de Reyes Maroto, a sumarse al proyecto.
Tras la recepción de la ministra Maroto en las instalaciones de Ciuden en el barrio de Compostilla, la ministra de Industria presentó a representantes del mundo empresarial y de las Administraciones locales bercianas un esbozo del proyecto, que fue desgranado con más precisión por el Comisionado del PERTE agroalimentario, Jordi Carbonell, que también fue gerente del parque agroalimentario de Lleida.
Reyes Maroto también mantuvo un breve encuentro con representantes de las plataformas contra los parques eólicos y fotovoltaicos que pretenden instalarse en el Bierzo, quienes le entregaron varias cartas con sus reivindicaciones, las cuales la ministra se comprometió a trasladar al Ministerio para la Transición Ecológica y el Resto Demográfico.
