Vicente Canuria ha precisado que la reincorporación del personal municipal a sus centros de trabajo se realizará de forma progresiva en función de las necesidades de cada servicio
El Ayuntamiento de León prepara ya la vuelta a la normalidad una vez que se ha superado la fase más aguda de expansión de la Covid-19 y con el objeto de facilitar una recuperación paulatina de la actividad social y económica.
Por ello, los responsables de cada servicio establecerán sus previsiones de reinicio y apertura de actividades, al amparo de las medidas generales determinadas por el Ministerio de Sanidad y en función de las diferentes fases que se encuentre el municipio leonés. En este aspecto, el concejal de Régimen Interior, Movilidad y Deportes, Vicente Canuria, ha precisado que las medidas para la desescalada irán también de acuerdo a las normas determinadas por la Sección de Prevención y Salud Laboral de la Subárea de Recursos Humanos, y del ‘Equipo de Trabajo para el Asesoramiento continuado a los órganos competentes del Ayuntamiento de León ‘ que pone a disposición de los responsables de las unidades las pautas a seguir.
Igualmente, el edil ha subrayado que el Ayuntamiento no se ha parado en ningún momento, compatibilizando la excelente tarea presencial de los servicios esenciales, trabajadores en todos los departamentos y teletrabajo.
Reincorporación del personal
Vicente Canuria ha explicado que la reincorporación del personal municipal a sus centros de trabajo se realizará de forma progresiva. Esta desescalada tendrá en cuenta por un lado las necesidades de los servicios y, por otro, se establece un cronograma de reincorporación progresiva de su personal de forma presencial. Asimismo, se mantiene la posibilidad de realizar teletrabajo, en función de las necesidades del servicio. En lo que se refiere al personal municipal clasificado como vulnerable ante el coronavirus (diabetes, enfermedad cardiovascular, hipertensión, enfermedad pulmonar crónica, inmunodeficiencia, cáncer en fase de tratamiento activo, mujeres embarazadas y mayores de 60 años) se priorizará la prestación de trabajo en modalidades no ‘in situ’. Además, cualquier empleado público con sintomatología compatible con la enfermedad Covid-19 no acudirá al centro del trabajo y se pondrá en contacto con los servicios de salud.
Distancia social
Por otra parte, el Consistorio de la capital leonesa reorganizará los espacios de trabajo (mobiliario, equipos de trabajo de uso común, pasillos, etc.) para posibilitar el distanciamiento social de dos metros. En aquellos puestos, en los que no se pueda garantizar este distanciamiento, se colocarán protecciones colectivas, como puede ser mamparas. En el caso de que no fuese posible el distanciamiento social, ni la colocación de protecciones colectivas, el personal deberá llevar mascarilla.
En atención al público, además de las medidas anteriores, se deberá limitar el aforo para poder garantizar el distanciamiento social y establecer cita previa. Si fuese necesario guardar cola, se marcará en el suelo la distancia de seguridad de dos metros entre una persona y la siguiente.
Asimismo, en la entrada de los centros de trabajo, se pondrá a disposición de los usuarios y las usuarias una solución hidroalcohólica. El acceso al centro será, en la medida de lo posible, un sentido de entrada y otro de salida, con unas marcas en el suelo que indiquen el recorrido.
La higiene, sigue siendo fundamental
El edil del área ha indicado que también se informará al personal municipal de las nuevas medidas a seguir y se recalcará las medidas higiénicas para reducir el riesgo de contagio como lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón o con gel hidroalcohólico, especialmente al inicio y al fin de actividades en instalaciones de uso compartido. Se le añade: evitar tocarse la nariz, los ojos y la boca; cubrirse la nariz y la boca con un pañuelo al toser y estornudar, y desecharlo; evitar el contacto físico en los saludos como apretones de manos, besos, entre otros.
No obstante, se pondrá a disposición del personal municipal los equipos de protección individual que determine la Sección de Prevención y Salud Laboral
Asimismo, se priorizará la prestación del trabajo en modalidades no presenciales, en la medida posible, y respetando los principios de corresponsabilidad e igualdad de trato, hasta alcanzar la fase de la nueva normalidad. Las modalidades de trabajo no presenciales podrán, puntual o periódicamente, compatibilizarse con las presenciales de prestación del servicio para facilitar la incorporación gradual, mediante turnos de los empleados. Para ello, la persona responsable de cada servicio o unidad podrá determinar turnos de trabajo presencial, cuando sea estrictamente necesario, optando si fuera posible, por rotaciones semanales con la finalidad de minimizar los riesgos para la salud.
Medidas de flexibilidad horaria
Asimismo, hasta la situación de nueva normalidad, es necesario mantener y adoptar medidas de flexibilización horaria, que podrán referirse tanto a las horas de entrada y salida, para evitar aglomeraciones en horas punta, como al establecimiento de turnos, así como la posibilidad de ampliar el horario de apertura de los centros de trabajo según los casos.
