La valla centra su foco en el Parque Agroalimentario de El Bierzo, que fue prometido y anunciado en el marco incomparable del Palacio de Canedo, por el propio presidente de la Junta para mejorar las sinergias entre producción y demanda, ante la presencia de distintas administraciones y empresarios. Finalmente todo ese bombo quedó en nada porque el parque se ha ido directamente a Valladolid en una mezcla entre insulto y desprecio hacia El Bierzo.
Este es el reflejo más esperpéntico de lo que los bercianos y por tanto todos los leoneses podemos esperar de la Junta de Valladolid, que tras crear el consejo comarcal lo ha infradotado de recursos y competencias a fin de que solo sirva como elemento de distorsión entre los leoneses pero no un elemento real de desarrollo para nuestra tierra, que además al estar gobernado por los partidos sucursalistas PP y PSOE hace una función más de acallar la reivindicaciones y protestas de los bercianos que de reivindicar y fomentar elementos de desarrollo.
Pero no solo el parque agroalimentario refleja el abandono por parte de la Junta de Castilla hacia El Bierzo , su desidia incluye un amplio grupo de sectores tanto las comunicaciones ferroviarias o por carretera con las autovías pendientes, la falta de desarrollos turísticos y de impulso a los paradores , la postergación del hospital del Bierzo y el abandono de la sanidad rural, la siempre pendiente ampliación de grados en el campus universitario y el impulso de la investigación.
LA ÚNICA SOLUCIÓN ES LA AUTONOMÍA LEONESA
Desde Conceyu País Lliones reconocemos que la única alternativa para El Bierzo pasa por una Autonomía Leonesa, descentralizada y solidaria entre las distintas regiones del Pais Llionés, donde elevar el estatus del consejo comarcal a uno regional, pues El Bierzo es una región del País Llionés, que por población, recursos, e identidad singular, merece un mayor respeto y protección del que ahora tiene, y con más competencias, recursos y atribuciones que así si , colaborará positivamente a un mayor desarrollo de El Bierzo. y por tanto de todo el País Llionés.
Porque ¿quién mejor que los bercianos y bercianas, para resolver los problemas de El Bierzo?
