sábado. 27.04.2024

El sector hostelero de Castilla y León, que constituye uno de los motores principales de la economía en nuestra Comunidad Autónoma, constata con indignación la falta de apoyo desde la Junta de Castilla y León.

Las empresas de hostelería y turismo representan el 12% del PIB autonómico, mantienen cerca de 100.000 empleos, y su actividad resulta también determinante para la supervivencia de sectores relacionados, como la industria agro- alimentaria, la comercialización de productos canal HORECA, o la producción agropecuaria. Son muchas por tanto las razones que motivan la necesidad del máximo apoyo por parte de nuestro Gobierno Autonómico.

Desde la Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León, organización empresarial que agrupa y defiende los legítimos intereses del sector hostelero y turístico de la Comunidad, seguimos esperando respuesta al plan especial pre- sentado el pasado 23 de abril, que contenía una propuesta de medidas específicas para ayudar a este importante sector económico ante la crisis provocada por la pandemia Covi19.

Entre ellas se contenían líneas de ayuda eficaces que contribuyesen a inyectar liquidez a las empresas para el mantenimiento de la actividad y del empleo, formación específica en materia higiénico sanitaria y protocolos Covid19, así como estrategias de promoción del destino Castilla y León, de sus recursos y productos turísticos.

Más allá de las escasas ayudas complementarias de otras administraciones de ámbito nacional incluidas en el Plan de Medidas Extraordinarias para la Protección a los trabajadores, a las empresas, a las familias y a las personas vulnerables con motivo de la crisis del Covid-19 previsto por la Junta de Castilla y León, a día de hoy, no hay ninguna medida sectorial específica de la Administración autonómica que pueda servir eficazmente a paliar las consecuencias devastadoras   de esta crisis en las empresas y en el empleo del sector hostelero.

Es cierto que el pasado 4 de mayo se publicaba la ORDEN CYL/363/2020, de 29 de abril, por la que se establecen las bases reguladoras para la concesión de subvenciones destinadas al sector turístico de Castilla y León para hacer frente a la crisis ocasionada por el COVID-19. Pero no lo es menos que estas bases imposibilitan el acceso a esta exigua ayuda a las más de 25.000 empresas hosteleras de Castilla y León. Bien porque son hoteles o restaurantes de mas de cinco trabajadores, o bien porque no pueden acudir a estas líneas de subvención por ser bares, cafeterías o establecimientos vinculados al ocio nocturno.

A la hostelería castellano leonesa le preocupa la falta de respuesta y apoyo de nuestra Junta de Castilla y León a las empresas de hostelería y turismo, apoyo, por cierto, que a otros sectores si se les está dando. Máxime cuando todos los indicadores constatan que éste, el de la hostelería, será uno de los sectores más afectados por la crisis y de más difícil salida.

Lamentablemente, hasta el momento, y sin dejar de reconocer el trabajo que en circunstancias extremadamente difíciles para todos viene desarrollando la Dirección General de Turismo de la Junta de Castilla y León, constatamos que las peticiones y reclamaciones para ayudar al sector que nuestra Confederación ha solicitado en defensa de la hostelería regional no han tenido otra respuesta más allá de buenas intenciones y de carencia de presupuesto de esa Dirección General. Aún estamos a tiempo, y son muchas las familias, trabajadores y sectores complementarios que, en todos los ámbitos, dependen del éxito de la hostelería. Por ello y por ellos entendemos que la predicada importancia que para la economía regional tiene el sector hostelero y turístico no merece en absoluto esta falta de respuesta y apoyo, reclamamos y exigimos, con toda firmeza, de nuestro Gobierno Autonómico, un plan específico que permita a nuestras empresas sobrevivir, reiniciar su actividad en términos de competitividad y mantener sus puestos de trabajo.

La hostelería regional hacia la reapertura sin apoyo del Gobierno autonómico