El proceso de esta concentración, con un presupuesto de 28 millones de euros, se ha llevado a cabo en 33,500 hectáreas, lo que representa el 75% de la tierra cultivable, en manos de 3,391 propietarios. Esta concentración ha multiplicado por cuatro la extensión media de cada parcela.
Este proyecto ha avanzado en un tiempo récord, culminando en menos de cuatro años, incluso con dos de esos años transcurriendo durante la pandemia. Este logro es parte del compromiso de la Junta de Castilla y León de iniciar procesos de concentración parcelaria en 150,000 hectáreas durante esta legislatura. Hasta el momento, ya se han completado 86,157 hectáreas. Además, se ha comenzado la ejecución de obras de infraestructuras en otras 150,000 hectáreas, de las cuales 61,000 ya han sido realizadas.
Los proyectos de concentración parcelaria no solo reorganizan las tierras para hacer que las explotaciones sean más eficientes, sino que también mejoran las infraestructuras, como caminos y desagües, con un enfoque en la protección del medio ambiente.
El consejero Dueñas enfatizó la importancia de la agricultura para la supervivencia de las ciudades, declarando: "Sin el campo, las ciudades no podrían subsistir". El proyecto en Los Oteros se considera un logro significativo y ejemplar de este compromiso, y se prevé que se completen todas las obras de infraestructuras relacionadas para la primavera de 2025.
